Hay un lugar en Londres, fuera del circuito tradicional del West End, que ofrece periódicamente pequeñas joyas musicales. Se trata de The Menier Chocolate Factory, un espacio único y versátil inaugurado como teatro en el 2004, y en el que también se ubican una galería de arte y un restaurante.

Después de acoger propuestas tan interesantes como TICK TICK BOOM! de Jonathan Larson, THE LAST 5 YEARS de Jason Robert Brown, SUNDAY IN THE PARK WITH GEORGE de Stephen Sondheim (producción que se transfirió al West End y posteriormente a Broadway donde obtuvo nueve nominaciones a los premios Tony), o LITTLE SHOP OF HORRORS (que también se transfirió al West End), desde el pasado 25 de julio se puede ver un nuevo montaje de THEY’RE PLAYING OUR SONG protagonizado por Connie Fisher y Alistair McGowan.

Se trata de un musical cálido e ingenioso que narra una historia semi-autobiográfica basada en la relación  entre el compositor Marvin Hamlisch (creador de la música) y la letrista (creadora de las letras) Carole Bayer Sager. El libreto es de Neil Simon. Marvin Hamlisch también es autor de la música de musicales como A CHORUS LINE, THE GOODBYE GIRL, SMILE o SWEET SMELL OF SUCCESS. Ha compuesto la música de más de cuarenta películas, y es ganador de un Oscar por la banda sonora de la película `Tal como éramos´. Carole Bayer Sager es autora de las letras de gran número de canciones, entre ellas la ganadora de un Oscar “Arthur´s Theme”, del filme `Arthur´ de 1981. Sus temas han sido grabados por artistas de la talla de Barbra Streisand, Michael Jackson, Frank Sinatra, Ray Charles y Celine Dion, entre otros. Por su parte, Neil Simon ha escrito multitud de obras a lo largo de las últimas seis décadas. Ha ganado tres premios Tony por `The Odd Couple´, `Biloxi blues´ y `Lost in Yonkers´. Por esta última ganó también el Premio Pulitzer en drama.

La producción original de THEY’RE PLAYING OUR SONG se estrenó en Broadway en 1979, ganando 7 premios Tony. En España, el musical es conocido por la versión dirigida por Ricard Reguant y protagonizada por Àngels Gonyalons y Pep Anton Muñoz. Se estrenó en 1990 en el Teatre Goya de Barcelona bajo el título de ESTAN TOCANT LA NOSTRA CANÇÓ, y en 1991 se estrenó la versión castellana (ESTÁN TOCANDO NUESTRA CANCIÓN) en el Teatro Alcalá de Madrid, en una versión traducida por Josep Maria Pou.

Comparado con el de España, el montaje que se presenta ahora en la Menier es mucho más sencillo y minimalista, en concordancia con las características del espacio que lo acoge. La escenografía se fundamenta en una plataforma giratoria que representa un disco de vinilo y sobre el cual se van añadiendo los elementos escenográficos básicos que sirven al desarrollo de la acción, tales como un piano, un sofá o una cama. Así, la baza más fuerte del espectáculo reside en la actuación de los dos protagonistas, que adquiere más fuerza por la gran proximidad física existente entre el público  los intérpretes.

Connie Fisher, la protagonista femenina, saltó a la fama en el Reino Unido tras ganar el concurso televisivo “How do you solve a problem like Maria”, que le llevó a protagonizar THE SOUND OF MUSIC en el London Palladium. Ahora cambia totalmente de registro para ponerse en la piel de Sonia Walsk, una excéntrica letrista. Fisher supera con nota el cambio de registro que supone pasar de una gran producción en el West End a una producción de pequeñas dimensiones como la que se representa en la Menier. En primer lugar, la complejidad lírica (y casi operística) del personaje de Maria Rainer ha sido sustituida por una interpretación vocal llena de matices cómicos y mucho más cercana al pop. A nivel actoral, THEY’RE PLAYING OUR SONG contiene infinitas frases de diálogo que requieren la habilidad y las tablas de una actriz completa y bien dotada para la tragicomedia. Fisher sale airosa del reto y consigue hacer creíble su personaje.

Por su parte, Alistair McGowan da la réplica a Connie Fisher interpretando el papel de Vernon Gersch con gran solvencia, recreando sin estridencias un personaje irónico y entrañable. McGowan ha participado en musicales como LITTLE SHOP OF HORRORS en el papel de Dentista (2007, en la producción de la Menier transferida al West End), THE MIKADO (2008), o el revival de CABARET representado en el Lyric Theatre de Londres interpretando el papel de Emcee (2008). En el Reino Unido es conocido por el gran público por su participación en el programa cómico `The Big Impression´ de la BBC.

Alistair McGowan y Connie Fisher en una escena de THEY´RE PLAYING OUR SONG

El punto más débil de la producción de THEY’RE PLAYING OUR SONG de la Menier es su estética, ya que se ha apostado por un look de los años setenta en una opción arriesgada que no es necesaria para explicar la historia. Esto está sobretodo poco cuidado en lo que se refiere a peluquería y maquillaje, especialmente del personaje femenino, lo que le da un aspecto poco favorecedor que dificulta la conexión del público con el espectáculo.

Sin embargo, esta apreciación no le quita mérito a esta comedia musical de diálogos ágiles y brillantes, con un repertorio de canciones tiernas y sin artificio que provocan que el espectador permanezca durante toda la función esbozando una sonrisa.

En definitiva, un espectáculo más que recomendable que destaca por su brillante sencillez y por las logradas interpretaciones de sus protagonistas. THEY’RE PLAYING OUR SONG se puede ver en The Menier Chocolate Factory hasta el próximo 28 de septiembre.