El rythm & blues norteamericano ha llegado a Londres con MEMPHIS THE MUSICAL, musical original escrito por David Bryan (componente de Bon Jovi), y Joe DiPietro (co-autor de I LOVE YOU, YOU’RE PERFECT, NOW CHANGE!) que en 2010 se convirtió en el gran vencedor de los premios Tony de la temporada, obteniendo cuatro galardones (Mejor Musical, Mejor Libreto, Mejor Partitura Original y Mejores Orquestaciones).

Basado en la figura del disc jockey Dewey Phillips, uno de los primeros DJs blancos en poner música negra en los años 1950, MEMPHIS es una musical sobre la libertad, la música y el amor.

El protagonista es Huey Calhoun, un joven blanco que queda embelesado por el sonido rythm & blues procedente de uno de los clubs de Memphis, y entra para descubrir que la voz que le atraía era la de una cantante negra, Felicia. El descaro y la peculiar personalidad de Huey le llevará a convertirse en el DJ de radio más popular de la ciudad, lo que aprovechará para intentar lanzar al estrellato a su amada Felicia, desafiando las estrictas normas sociales de la época, y la situación de segregación racial vigente. En un momento dado, Felicia deberá escoger entre el amor a Huey y su incipiente carrera musical...

El libreto de DiPietro muestra la brutal rigidez de la segregación, el subversivo poder de la música popular y la manera en la que la radio estaba mucho más avanzada que la televisión a la hora de aceptar los cambios y de actuar con libertad.

La música de David Bryan captura la esencia de los grandes éxitos de rythm & blues de la época, combinándolos con momentos soul, gospel y potentes baladas como “Coloured Woman” o “Memphis Lives In Me”; con un energético número final “Steal Your Rock ’N’ Roll” que hace poner en pie a todo el público asistente.

El elenco de MEMPHIS está liderado por Beverley Knight como Felicia, una de las mejores cantantes de soul británicas, que combina carisma, poder y a la vaz fragilidad; y el magnético Killian Donnely que construye un irreverente, simpático y seductor Huey, ofreciendo también grandes momentos vocales. La química entre ambos intérpretes es imprescindible para que su historia llegue al público, y lo consiguen con suma facilidad.

Ambos están acompañados por un enérgico y entusiasta ensamble, que interpreta con gran pasión las excelentes coreografías de Sergio Trujillo.

David Gallo ha diseñado una escenografía brillante, con estética clásica, permitiendo el cambio de una escena a otra de manera eficiente, pasando de un sórdido club de noche a un brillante estudio de televisión o una emisora de radio.

MEMPHIS es un musical que desprende una gran energía, con buena música, grandes interpretaciones y mucho soul.